sábado, 11 de octubre de 2008

Un Ministro de Ancash

Cuando Valdivia renuncio Ancash perdió, nadie lo dice pero todos saben que es así, las autoridades de distritos y provincias en esta parte del país sonríen con sus electores gracias a las obras que pudieron realizar gracias a la Inter gestión de Juan; muchas electrificaciones rurales, obras de saneamiento, e incluso proyectos financiados por mineras, hidroeléctricas, o el gobierno tuvieron lugar, también es necesario recordar que el punto final Norte para la llegada de gas natural en chimbote fue estructurado, planificado y considerado por este ancashino.

Lo mas importante para mi es que Juan se encargó de que los ancashinos supiéramos cuanto de canon nos correspondió durante los años 2007 y 2008, para que de esta forma pudiéramos fiscalizar su uso por nuestras autoridades. Expuso la necesidad de que este dinero de todos los ancashinos pudiera ser destinado correctamente a obras de impacto en el caso de su administración por el gobierno regional, y al ver que este se perdía en la corrupción e ineficacia fustigo con encono, y lo hizo no por ganancia política sino por que en realidad Ancash le interesa.

Este ministro tomó la decisión firme al renunciar de forma irrevocable inmediatamente al gabinete, horas después de escucharse el audio, donde solo se implica su nombre, y aun sabiendo que no tenía participación directa ni indirecta en el entuerto delictivo de Rómulo León Alegría; lo que revela su decencia, honorabilidad, y responsabilidad que debe tener todo hombre que se respeta, respeta sus ideales, su partido, la confianza presidencial y sobre todo enaltece a sus ancestros, familia, amigos y compañeros.

Este hombre, alcalde de la provincia del Santa en dos oportunidades, congresista en dos oportunidades y ministro durante mas de dos años a devuelto con creces a Ancash lo que este pueblo le dio, y es probablemente alguien a quien este pueblo debe recordar como uno de sus hijos que ayudo a escribir la historia de chimbote.

Sin embargo, su carrera política aun no ha terminado, muchos así lo creen o lo desean, empero se equivocan, Ancash aun necesita a Juan Valdivia Romero desde la mas humilde trinchera hasta la mas alta posición.

Fuerza Juán

Pd. Hable con él solo una vez, le di la mano dos, nunca le pedí un favor ni directa ni indirectamente; Sin embargo, le agradezco lo que hizo hasta ahora por Ancash.

Dr. Jorge Enrique Ramal

El Compañero Jorge del Castillo

"Lobby", palabra decente en la sociedad política que busca presionar el centro del poder para beneficiarse. Estos favores se entienden como económicos, pero no siempre son así. Allí está la política de la zancadilla que desestabiliza y genera caos. Entonces solo queda la salida política.

El Premier del APRA en nuestro segundo gobierno no cedió un milímetro a las tentaciones inmorales del fujimorismo; la versión criolla del colonialismo, ahora los caviares, también se la tenían jurada; pero también, se va por que lo que el Perú avanzó durante estos dos años y tres meses, en infraestructura y grandes proyectos de envergadura descentralizadora, tenía que ser negado por los enemigos de la decencia. Nuestros enemigos jamás reconocerán una obra buena del aprismo, querrán recordarnos el lado oscuro que ellos generan.

Pero no se trata solo del APRA, sino de las pretensiones de un Jorge aspirando a las presidenciales del 2011.

Políticamente el APRA como proyecto ha asumido la responsabilidad del juego democrático. Eso nos diferencia de las dictaduras. Entre los videos del pasado y los audios de hoy, es que ahora no existe la extorsión de una prensa vendida en los salones del SIN. Jorge con su renuncia nos recuerda que la democracia es nuestro principal valor.

Pero la seguridad nacional y la estabilidad política no pueden estar expuestas en manos del tejido de la corrupción. Ninguna democracia puede tener la garantía de estabilidad si no se interviene con leyes que prevengan las malas prácticas ¿Acaso el mismo guión mafioso no se habrá seguido en la firma de los contratos mineros del pasado?

Si queremos Estado y nacionalismo, pues no solo lleguemos a la investigación más profunda hallando a los culpables, sino dando leyes cautelares que impida esas tentaciones corruptibles inherentes a la naturaleza humana. Pero el país tampoco puede consentir se institucionalice y legalice la escucha telefónica como "procedimiento perverso" –para citar textualmente al Premier Jorge Del Castillo – y "crear un clima de zozobra antidemocrática" al más puro estilo de este gris cielo de tufo limeño.

Salud y larga vida al amigo y compañero Jorge Del Castillo, sin indicio o prueba firme de acto doloso. Se va por la puerta grande, como los grandes. Con el brazo izquierdo en alto y saludando imaginariamente a nuestro maestro.
Víctor Raúl Huamán

viernes, 10 de octubre de 2008

Mendigando con lata de oro

Reflexiones sobre la doble moral que destruye nuestra identidad

Te despiertas y escuchas en la radio que un audio se va a tumbar al Gobierno Aprista producto de la venganza del ex general Rospigliosi. Caminas hacia el trabajo y ves titulares espectaculares y apocalípticos con ratas volando y bolsas de valores que caen mismo meteoritos. A tu lado la gente se dirige casi corriendo a sacar sus ahorros del Banco y en tu centro de labor ya se empieza a jugar la lotería de quiénes serán los que salgan disparados en la reestructuración de emergencia.

No es un sueño chocherita, la cosa pasa en el País de la Maravillas, ya deberías estar acostumbrado ¿no?.

Y no pues… no estoy acostumbrado a perder la moral tan fácil.

No estoy acostumbrado a perderme en la doble moral que está infectando a nuestro país y mil veces no puedo dejarme convencer que la cultura del periodismo de destapes a punta de violaciones a los derechos individuales, es la única manera de sacar a la luz la corrupción que existe y está enquistada en nuestra sociedad.

De la ficción a la fricción

Es el tema de conversación actual (lo el audio y lo de la caída de la Bolsa) y hasta da la impresión que el Apocalipsis se desata en nuestro país al escuchar las opiniones sobre la caída de un nuevo gobierno peruano y el descubrimiento, una vez más, de la corrupción extrema en los niveles distintos del aparato estatal, amén de que nuestra economía no va a resistir el embate de esta nueva Depresión Mundial.

¿Novedad de novedades?, “na´ que ver causa, eso ya lo olía desde hace rato, así que subí los precios de la fruta pa´que no me agarren dormiu”, fue lo que me comentó el que atiende el puesto de la esquina. Mejor analista no consigo encontrar.

Justamente conversando con un compañero de trabajo resultamos evolucionando la figura de Antonio Raymondi del mendigo en un banco de oro para definir al Perú como: “un mendigo que pide limosna en un tarrito de oro”.

¿Absurdamente imaginativo?, ni ahí.

Dobleteando ando

La verdad es que eso somos porque no nos damos cuenta que tenemos frente nuestros ojos una riqueza que diariamente destruimos la cual es nuestra cultura, y no me refiero a nuestra cultura andina, migratoria y cosmopolita que da tema para rato, sino aquella que diariamente nos hace dar el paso de trabajar, estudiar y tratar de salir adelante, pese a que, científicamente, el peruano no debería existir, de la misma manera que una abeja por las leyes de la aerodinámica no debería volar.

Y por supuesto, esta cultura cada día muere cuando aplicamos esa doble moral que hace que hablemos en determinado momento de una forma y al siguiente momento hagamos lo contrario, que le digamos a nuestro hijo que no mienta y rato después le pidamos que diga que no estamos a la doña de la tienda. Esa dualidad que hace de nuestros políticos unos expertos en hablar sobre honestidad y justicia en defensa de militares asesinos y después sigan matando diariamente a ciudadanos con políticas reacias a poner mayores condenas a los malos transportistas o a los jueces corruptos.

Esa doble moral que hace escuchar a diestra y siniestra y en horario repetido los audios de unas conversaciones de un par de malcriados de huactería que ¡oh sorpresa!, fueron ministros o abogados de presidentes y primeras damas. Doble moral que hace salir a Alan García a inaugurar una fabrica de pañales cuando el país espera acciones concretas contra la basura enquistada en su administración.

Esa forma criolla de ser que hace que saludemos a una muchacha con una sonrisa inocente para después meterle una mirada de violador en serie a penas se voltea. Sí señores, esa es la verdad de nuestra realidad y la cual nos impide surgir como país, esa doble moral que se nos enseña desde niños y que si no empezamos a revertir nos acompañará por los años que nos dure la ilusión de seguir siendo un país y no una colonia estadounidense a tiempo completo.
Sarko Medina Hinojosa
Periodista
Arzobispado de Arequipa

miércoles, 8 de octubre de 2008

La caída libre del mercado ¿Arrastrará al neoliberalismo político?


La discusión sobre el impacto de la crisis financiera de EEUU. en el Perú debería tratar el efecto que tendrá en la viabilidad del neoliberalismo económico y político de la región latina y del Perú y en la capacidad de respuesta frente a este colapso de parte de las corrientes democráticas en la región. Sin embargo hasta ahora la discusión se centra sólo en que sí esa crisis afectará la macroeconomía peruana.

La caída de los mercados financieros y de Wall Street obliga al modelo económico capitalista a presionar por cambios para tratar de mantener su supremacía a nivel global. Ese cambio pasa por aceptar que este modelo necesita para sobrevivir de la regulación del Estado, de controles más finos al hasta hace poco omnipotente mercado, y por reconocer sin pudores que los capitalistas rentistas tienen que recurrir a la ubre del Estado, pidiéndole que estatice sus perdidas. Esto es todo lo contrario a la privatización que piden cuando se auguran utilidades. Muchos economistas y contribuyentes de EEUU rechazan estas medidas por el costo que tendrá en las cuentas fiscales, lo que presionó en la primera votación de su Congreso en contra del salvataje financiero de 700,000 millones de dólares; cifra mucho mayor que todo el PBI latinoamericano.

Uno de los grandes perdedores son los bancos de inversión, esos entes encargados de otorgar grados de riesgo y de inversión a países como el Perú, con el fin de vendernos la idea de que vivíamos en un paraíso, y que para ello había que dar facilidades y toda la “seguridad “jurídica” del caso a los grandes inversionistas, cobrándoles menos impuestos y aplicando la política del cholo barato. ¿Qué grado de confianza pueden tener ahora sus calificaciones, tan aplaudidas en su momento por el gobierno y por cierta prensa adicta?. O si no preguntémosle a la aseguradora AIG, que según los bancos de inversión eran la mejor del mundo, y que ha tenido que ser prácticamente estatizada para salvarla de la ruina.

El mes de setiembre es para Wall Street y el neoliberalismo comparable en derrota en el plano económico, lo que fue la caída del muro de Berlín para el socialismo en el aspecto político. Sin embargo, el neoliberalismo como expresión política no se puede desligar de su práctica económica.

Esto es bueno remarcarlo ahora que intelectuales como Vargas Llosa y algunos editorialistas peruanos tratan de separar estas dos columnas del neoliberalismo, para buscar salvar la parte política. No se trata de decir solamente que a partir de la caída de Wall Street el Estado debe tener un rol más dinámico en la regulación de la política económica. O de que el Estado preserve los recursos naturales, antes de fomentar la inversión y la presión sobre éstos, y evitar continuar con un modelo de desarrollo que no resultará económica ni ambientalmente sostenibles. O de asignarle un papel más preponderante en materia de infraestructura, para evitar que las concesiones que promueve terminen favoreciendo más al concesionario que al usuario. Es decir, no se trata solamente de evitar aplicar la mal entendida visión del perro del hortelano.

Se trata de que la expresión del neoliberalismo político (democracia meramente representativa, derechos civiles mediatizados, derechos laborales conculcados, autocracia partidaria, etc.) también está en crisis. Una muestra de ello es que la clase política en el gobierno es incapaz de manejar los conflictos sociales, y que la capacidad de diálogo de los gobernantes se corta cuando no puede ofrecer solución a demandas, que sí podrían ser atendidas con los recursos disponibles, pero que en la lógica del modelo político imperante no son prioritarias.

Frente a esa realidad una alternativa que busque reemplazar al neoliberalismo político tendría que tomar en cuenta varios temas. Uno de ellos es instaurar una democracia participativa, donde el ciudadano pueda concertar y vigilar aspectos de la gestión pública, y darle la posibilidad de ejercer la revocatoria del mandato de las autoridades en todos sus niveles, empezando desde el Presidente de la República. La educación ciudadana y en valores es esencial para garantizar derechos y libertades sin medias tintas. Para desterrar el mal llamado libre mercado, el modelo económico que se construya debe ser nacional y abierto al comercio justo, con un Estado eficiente, promotor y regulador, lo cual es muy distinto a estatismo. ¿Cuántos y que partidos políticos y organizaciones se comprometerán a sacar adelante esa tarea?.
Percy Aquino Rodríguez